sábado, 1 de agosto de 2009

Entre Antojerias 2

Siempre reimos
para ver que no hay llantos
para ocultar lo que dentro
estamos llevando.

Nos tragamos el antojo
se queda ahí tan seco,
tan presente,
que a veces nos quita el sueño;
pero por qué quedarnos callados
y no de palabras;
si no de actos
que son los que al final del día
valen por oro
lo que dejamos tirado.

Que hay de mal
en probar,
algo que si la gente mira extraño
y no debe importarnos.

Lo cierto es que nos dejamos
y esos antojos se acumulan
y hacer costumbre en ello
nos da el mal hábito
de quedarnos lo que
tendriamos que compartirnos.

Que de siempre es malo
encontrarnos la mejilla
cuando lo unico que queremos
es buscarnos los labios.

Darío Olguín

1 comentario:

Alejandra Jael* dijo...

mmmmm mira ya encontre la causa de tu buen humor, me da gusto extraño!!!! ké a ké me refiero??? creo ke la respuesta esta en ke su nombre empieza con M. Un abracín lejano y extrañador jajaja
"extrañame hasta ke mi nombre se borre de tus labios"