domingo, 11 de junio de 2006

El ocaso no ampara

Y la noche cae
puede que solo,
o sólo es idea mia
no hay sombras
las penumbras.

Se pudre mi mente
más bien siente,
cansancio: regularmente;
habra que ordenarme
o desorbitar mi almohada,
hoy vuelve a ser igual,
no te encuentro
no siento tus manos recorriendome
algo me hace no pensar:
en ti.

Me marea el martirio
no pienso en discutir
total si quieres irte
el trato es abandonar
sin que el otro de explicaciones
conoces gente
yo sigo encerrado en mi templo
para que celarte
total la desición no es un volado
lo que vuela no es mi corazón
tu recuerdo simplemente
queda grabado
en el tatuado musculo
que late y late
y no deja de rebasar
lo que hoy
se ha vuelto
solo:
ayer.
Darío Olguín

Si el ocaso no ampara
y mi vida no repara
a que me detengo
pongo las velas
comienza el viaje
sin regreso.
DOZ

lunes, 5 de junio de 2006

Una estreLLa en mis ojos


te prefiero como bisuteria
ambigua y sencilla
pero con un brillo exclusivo a mis pupilas
que crean tu sonrisa
a un diseñado diamante
que me roben cualquier día en la calle
quedome quedandoteme
busco un sueño
un cielo una guia
y la estrella de gran luz
eres solo tu
Darío Olguin

Viento al norte

Si me dejas al borde de tus sueños
no cabría ni la mitad de mi esperanza
no recordaría el perfil de tu rostro
ni tu cruel silueta cuando avanza.

Si te encanta el norte del sueño
por qué cuando digo soñemos
me mandas al sur de tus lamentos
donde no hay más cobijo
que el susurro del viento
azotando cual cruel huracan
mis lastimados ojos que no te ven más.

Que tal si me encuentro una noche
con tu destellante mirada
bajo el influjo de la lluvia
materializando mi sueño de un abrazo
cruenda angustia de despertar sin tus labios
de amanecer ciego de esperar
que la brisa ciclonica se lleve tu ayer.

Que sucede si mis pupilas ya no dilatan
si no vuelvo a escribirte
si mi canto se pierde en el lamento del abismo
si la desolación te cubre como mi manto
que entre sueños y nocheslleno la nostalgia;
que nos cautivo al amarrar
tus manos y las mias
intercambiar cuestiones sin vida
que vieron la luz al volver a suspirar.

Y si me despierto,
y si te despiertoc
on el desayuno en la cama
con un beso prolongado
con el calor de mis manos
con el olor de la piel
que ya es uno sólo
creando este ser
que no va más allá de mi luz
pero si mucho mas allá de tus sentidos.

Y quiza si el norte se cruzara
con el sur al que me mandas
sería menos complicado
y las mañanas más frescas
y el perfume que embriaga la habitación
es sólo tu sudor
hecho uno con el mio.
Darío Olguín