domingo, 26 de julio de 2009

Miel de escorpion

Ahora bien, cuando todo empieza a ponerse en un vacio llamado vacacional y de una recomposición extrema las partes que forman mi ser, al hacer un nuevo camino que entre las lluvias eternas recorro en penunbras es la hora de bien preguntarse; ¿Qué hay en esta locura de-mente a la que he osado llamar mi vida?
Para bien hhe de saber que mucho de lo hecho o lo conseguido hasta el momento no es nada basado en las capacidades; lo que me convierte en un acervo de capacidades ignoradas pro mi mismo y que ha de recomenzar por el simple hecho de reacomodar las imagenes mentales y hacer un repaso minucioso en cada milímetro cuadrado de mi hogar y mi persona, lo cual emerge de una necesidad de estar más tiempo conmigo mismo y repasar todo lo que he dejado atras y ver que es loq ue busco a futuro, sin basarme en los clichés estandarizados por mi mismo en diferentes oportunidades de mi existir.
Hay que dejar atras las jugadas azarosas y las empresas que han surgido de ellas, la realidad golpea y en los sueños quiza este bien pensar en ángeles, estrellas, lunas, sonrisas, cielos y demás cosas que distraen la razón primordial que en los sueños evocan un sentido de permanencia no física pero si espiritual, sobre la cual discrepo a veces, sólo para olvidarme de mi mismo. A donde llevara la vera en la asombrosa cualidad de ser yo mismo por mi mismo y que de verdad puedan reflejar las ideas de medios a la gente que me rodea y deje de verme o sentirme como un extraño morando en ajenos tiempos y quitando lo preciado a los demás; no por ello doy en bien decir que soy un ladron de ilusiones u que discrepo de las ópticas contrayentes de la realidad que ufana su sentido en caer sobre mis hombros como pesada loza que no atiende razones de impuros atropellos hacia mi persona loque conlleva a revolotear como cadena de alabastros en un huracán oprimido en el corazón.
A bien dar a entender que los sentimientos son vagos y estoicos en veces convertidos en pequeñas sutilezas con tonos de gris a negro como lo es mi personalidad en verdad, un cáracter agrio y aspero que envuelve en sarcásticas aventuras y en más de una desventura a este ser que de eterno tiene una pizca de canela y dos de sal, para que seguir luchando contra la corriente, ciego de la luz que se muestra en el sendero y caminar a oscuras para descubrir nuevas formas de tener sentido en una casita de palillos construida en par de segundos para guarecerme de la realidad.
No queda más opción que caminar y saber que se han hecho las cosas de una forma que a mi entender no está mal, pero deja mucho en que pensar y decir que pudieran estar bien, quiero un 24/7 para mi y encontrarme sin perderme una vez mas.

Darío Olguín

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